A propósito de canciones que son tendencia, recuerdo los boleros y las rancheras con nostalgia, será por su escasez de prosaísmo. Géneros casi extintos, tan aptos para llorar abandonos o dar serenatas sin necesidad de marcas. Qué tiempos aquellos. Frase desgastada, sí, como el amor romántico o la monogamia.
Extraño, sin embargo, la bonhomía de los versos de Armando Manzanero. Vaya caballero.
“Ahora que te vas
Armando manzanero
Que no estarás conmigo
Recuerda en las mañanas abrigarte
Todo el tiempo de cuidarte
Que eres fácil de enfermar”
Son muchas las teorías e investigaciones sobre la monogamia en busca de identificar su razones y que van desde el cuidado de la salud pública y de la crianza de los hijos, hasta el control de la herencia. Sea lo que fuere, es un acuerdo social, como el lenguaje, la constitución o el divorcio.
La monogamia sexual no se ha cumplido casi nunca. Si un monógamo sabe que no le van a pillar tiene muchas probabilidades de ser infiel, de saltarse la monogamia sexual. Pero eso no implica que se vaya a saltar la monogamia social”, dice el etólogo Desmond Morris a este respecto. Dudo que se necesiten grandes estudios para evidenciarlo.
Christopher Ryan, psicólogo, sostiene que la paternidad, la familia nuclear y el control de la vida sexual de la mujer tomaron importancia a partir de la propiedad privada, lo que también condujo al inicio de las guerras por los bienes, entre otras cosas.
Pero volviendo a la música, ya lo decía el histriónico Raphael hace 30 años:
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